Miriam Akkermann

Musicóloga | Tema Perfil Acústico

¿Qué llevas en la maleta?

Me gustaría grabar sonidos en muchos sitios distintos y para ello tengo varios micrófonos, pantallas antiviento y cables, además de dos grabadoras. ¿Cómo suenan los glaciares? ¿Qué se oye en los bosques? ¿Cuánto de lo que se oye tiene origen humano? En las grabaciones de campo me gustaría trabajar en estéreo, binaural y con Ambisonics. En caso de que, por razones meteorológicas o técnicas (lluvia, temperatura) no sea posible trabajar con grandes equipos, la grabadora pequeña es una opción de emergencia que permite al menos registrar algunos sonidos. Además, para grabar en perforaciones en el hielo tengo una caña de micrófono que permite sostener el micrófono a distancia. La cámara fotográfica sirve para fines de documentación, por ejemplo, para establecer la posición y orientación de los micrófonos.

¿Cuál es tu herramienta más importante en la expedición?

Mi utensilio más importante son mis oídos. Los oídos cumplen dos funciones distintas: Son la base para poder reflexionar sobre qué registrar en mi grabación y sirven como órgano de control para esas grabaciones, con el fin de evitar fallos técnicos. Como musicóloga, dedico mucho tiempo a estudiar las diferentes formas posibles de percibir los sonidos y cómo se perciben. Eso es válido tanto para la música clásica como para los paisajes sonoros en la naturaleza. Como artista sonora, justamente las situaciones y los entornos acústicos inusuales, como ahora en Ecuador, me resultan extraordinariamente interesantes.

¿Qué es lo que más curiosidad te suscita?

Por lo que tengo más curiosidad es por saber cómo podemos llevar a la práctica sobre el terreno las ideas del grupo, ya que tendremos que cooperar de manera muy estrecha pese a las diferentes áreas de investigación. Para mi proyecto es muy emocionante averiguar cómo suenan los glaciares y cómo se puede grabar eso técnicamente. ¿Suenan distinto los diferentes glaciares? ¿De qué se componen los paisajes sonoros? Y, muy especialmente: ¿Pueden servir también las grabaciones de audio para obtener otros conocimientos a partir de la información acústica recogida? Esta pregunta guarda una estrecha relación con el proyecto de Robert y Ricarda. Me hace mucha ilusión aprender a extraer testigos de hielo y analizarlos, y también explorar la fauna (acústica) con Christian.
Médico | Tema Afectación y percepción del cambio climático

Martin-Immanuel Bittner

¿Qué llevas en la maleta?

En mi maleta sobre todo hay cosas que la mayoría de nosotros usamos también todos los días: Un ordenador portátil, un cuaderno con un lápiz, una batería de recambio, un dictáfono con auriculares y —para ambientarme para la expedición— una biografía de Alexander von Humboldt.

¿Cuál es tu herramienta más importante en la expedición?

Para el estudio de entrevistas que yo he planeado el instrumento más importante será el dictáfono, que permitirá transcribir y evaluar las entrevistas en toda su extensión incluso una vez finalizada la expedición. Esto posibilita un análisis mucho más preciso, que puede llevar a una comprensión más profunda de las formas de percibir el cambio climático.

¿Qué es lo que más curiosidad te suscita?

La expedición de la Junge Akademie reúne a científicos de muchas disciplinas diferentes y tengo mucha curiosidad por ver cómo va a cambiar nuestra propia percepción de la investigación y el trabajo científico, que ahora está marcada por nuestra especialidad; por ejemplo, cuando las mediciones de los parámetros climáticos o la observación de la fauna local se intercalen con las entrevistas o con las grabaciones de patrones sonoros.

Christian Hof

Biólogo | Tema Flora y Fauna

¿Qué llevas en la maleta?

Los prismáticos, el catalejo y la guía de campo no pueden faltar nunca como herramientas básicas para la observación de aves, que pasó de ser una pasión personal a formar parte de mi actividad profesional. Aparte de eso, mi equipaje incluye también una lámpara ultravioleta y una sábana que sirven de trampa de luz para insectos voladores nocturnos. También me llevo un cazamariposas, varias trampas y recipientes para capturar, transportar y retener temporalmente insectos y otros animales pequeños. Y por último una cámara con varios objetivos, desde un macro hasta un tele, para fotografiar fauna variada, desde las hormigas hasta un cóndor.

¿Cuál es tu herramienta más importante en la expedición?

La herramienta más importante será la cámara. Las regiones montañosas de los Andes, y especialmente en Ecuador, se encuentran entre las más ricas en especies de nuestro planeta. ¿Cómo varía la complejidad y diversidad de las formas, especies y ecosistemas entre los diferentes hábitats por los que viajamos? ¿Los altera la influencia humana? Esas son las cuestiones que me planteo en nuestra expedición. Está claro que registrar cuantitativamente la diversidad biológica constituye un desafío, el tiempo siempre resulta escaso. Por eso empleo procedimientos visuales y métodos de análisis digital para llegar a unas estimaciones simplificadas, pero válidas, de la biodiversidad de la flora y la fauna, y para ello usaré sobre todo mi cámara.

¿Qué es lo que más curiosidad te suscita?

Por supuesto que un viaje de investigación tras las huellas de Alexander von Humboldt es algo sumamente especial para un zoólogo, ecólogo y biogeógrafo y, «naturalmente», siento especial curiosidad por la diversidad de los animales (sobre todo las aves) y la vegetación, así como por saber cómo influye en ellos el ser humano. Especialmente emocionante resultará la colaboración interdisciplinar con las compañeras y los compañeros de las diferentes áreas de investigación, lo que quizá nos lleve a descubrimientos que vayan mucho más allá de la suma de resultados de las diferentes investigaciones individuales. Por mi experiencia en la Junge Akademie sé que la convergencia de los diferentes campos de especialidad conduce a descubrimientos inesperados, inusuales y, por tanto, extraordinarios. Eso solo ya es motivo suficiente para estar ilusionado con la expedición Antropoceno.

Químico | Tema Microplásticos

Robert Kretschmer

¿Qué llevas en la maleta?

Para encontrar los microplásticos me llevo, entre otras cosas, filtros finísimos, una báscula y jeringas para las que también tengo filtros muy finos. Además, una bomba de vacío, recipientes para derretir los testigos de hielo y una bolsa con guantes integrados (para que el análisis no se vea alterado por partículas del aire). Como parte de las muestras las extraemos de glaciares en altura, tampoco puede faltar el equipo correspondiente.

¿Cuál es tu herramienta más importante en la expedición?

¡Mis manos! Ya sea de camino al lugar del muestreo, en la extracción de las muestras o en el análisis de estas, siempre se requiere destreza manual y una habilidad artesanal.

¿Qué es lo que más curiosidad te suscita?

Por un lado, por supuesto, los resultados, pero por otro lado también la interacción con los colegas investigadores. Tengo ganas de ver cómo se investiga en otras disciplinas y cómo se plantean ellos las cuestiones científicas. Lo que más me gusta son las preguntas de los que están más alejados de mi campo de especialidad, porque me inspiran para cuestionar mis propias ideas y revisarlas. Con frecuencia, eso arroja vías de investigación nuevas y estimulantes.

Dirk Pflüger

Informática | Tema Perfiles de Imágenes y Bases de Datos

¿Qué llevas en la maleta?

En la era del big data y de la inteligencia artificial, se me abren oportunidades con las que Alexander von Humboldt ni siquiera podía soñar. Me llevo herramientas portátiles para recoger y valorar datos de manera (semi-)automática. Entre ellas está una cámara robotizada, un trípode, una cámara, un cuaderno de notas y, por supuesto, un ordenador portátil, además de muchos cables, baterías y soportes de datos (no aparecen en la imagen). Si el tiempo acompaña, podré registrar unas cantidades gigantescas de datos gráficos en un periodo muy breve. Intentaremos valorarlos de manera automática, con el fin de clasificar, por ejemplo, zonas de vegetación, flora y fauna. Si todo eso sale bien, luego podremos llevarnos a otras personas virtualmente a las estaciones de nuestro viaje de investigación.

¿Cuál es tu herramienta más importante en la expedición?

Según el tiempo que haga, un paraguas o las tarjetas de memoria 🙂 En serio: No puede fallar ninguno de los componentes técnicos y el tiempo tiene que acompañar más o menos. El papel y el lápiz de los tiempos de Humboldt eran menos delicados. A cambio, nosotros podemos analizar fotos y grabaciones de audio, clasificar plantas y animales o calcular el nivel de los glaciares y la altura de las cadenas de montañas, todo ello digitalmente. Con un buen montón de datos en la maleta, la expedición no concluye con el viaje de regreso, sino que continúa luego con la investigación en casa.

¿Qué es lo que más curiosidad te suscita?

Me hace ilusión la interacción entre los científicos de seis disciplinas realmente diferentes. El trabajo en la Junge Akademie muestra que eso suele conducir a ideas nuevas y sorprendentes y que se aprende mucho de los otros. Mi trabajo de investigación cotidiano suele comenzar con datos que me vienen dados. En nuestra expedición por fin tengo la posibilidad de acompañar y ayudar a las compañeras y los compañeros sobre el terreno según recopilan los datos, y yo mismo puedo registrar una gran cantidad de información. En especial, tengo mucha curiosidad por saber cuáles de nuestras muchas ideas tendrán éxito. Por ejemplo, cómo resultará la idea de fusionar las grabaciones de sonido de Miriams con mis datos de imagen y cómo funcionará el análisis automatizado de las imágenes de Christians de los insectos atraídos.
Física | Tema Cubierta de Hielo y Nieve​​

Ricarda Winkelmann

¿Qué llevas en la maleta?

Para los trabajos en los glaciares tengo una perforadora de hielo y otros aparatos con los que podemos analizar las características físicas y químicas de las capas superiores de nieve y de hielo. Un testigo de hielo tiene una longitud de 1-2 metros; lo cortaremos en láminas de unos 5 cm de grosor y determinaremos respectivamente la temperatura, el contenido en sal y la densidad de las diferentes capas. Tampoco deben faltar los correspondientes recipientes, el salinómetro y una báscula, y por supuesto el equipo de alpinismo para el trabajo en el hielo.

¿Cuál es tu herramienta más importante en la expedición? ​

¡Papel y lápiz! Cuando sacamos una muestra del glaciar, hay que determinar y protocolizar directamente el lugar, la altura, la temperatura y otros parámetros de las capas superiores de nieve y de hielo. Si hace frío, viento y humedad, la mejor forma de hacerlo es «a la antigua», de forma analógica: después de la expedición analizaremos los datos con ayuda de modelos informáticos modernos.

¿Qué es lo que más curiosidad te suscita?

Siento especial curiosidad por saber si en estos niveles vamos a encontrar también microplásticos en la nieve y en el hielo. Y, como climatóloga, sobre todo me interesa qué efectos tiene el cambio climático antropogénico sobre los paisajes (helados) y los ecosistemas de Ecuador, y qué personas allí se ven más afectadas, a su vez, por el retroceso de los glaciares y los cambios climáticos locales. Por supuesto que me hace mucha ilusión el intercambio de información y poder conocer de cerca otros campos de investigación y sus métodos. La expedición de la Junge Akademie es una ocasión única para colaborar con investigadores de campos muy diferentes, desde la química y la biología hasta el arte sonoro.